
La investigación, publicada en la revista Nature, deja de lado por primera vez los clásicos cuatro nucleótidos de ADN, que funcionan como las letras que escriben el código genético que conocemos (A, T, C y G).
En cambio, este organismo generado en base a una muestra de la bacteria Escherichia coli funciona con dos nuevos términos, integrando ahora los bloques artificiales X e Y, y llegando a un total de seis nucleótidos.
Los cientÁficos esperan que la inclusión de estas nuevas letras permita a su vez la creación de nuevas “palabrasâ€, es decir, de nuevas formas de vida y proteÁnas nunca antes vistas. No obstante, a pesar de este llamativo alcance, ya hay ciertos detractores a la investigación que aseguran que su llegada podrÁa generar problemas éticos o legales.
A partir de ahora, los cientÁficos esperan centrarse en puntos como la supervivencia que tendrá la bacteria, como también si será posible sacar una nueva cadena más allá del par X-Y.
Además, todavÁa mantienen como desafÁo la posibilidad de producir proteÁnas nobles a través de estos nuevos organismos y mantenerlas en ambientes no controlados, algo que todavÁa no han logrado y que permitirÁa la creación de nuevos tipos de vacunas y medicamentos.